Hay dos cosas que hemos aprendido en el último año y medio. Una es que todo ocurre muy rápido. Y, la otra, es que la sociedad demanda cambios.

Ante esta realidad, las marcas deben ser ágiles y evolucionar. En caso de no hacerlo quedan condenadas a morir por obsolescencia, a ser desterradas o, peor, a quedar relegadas en la mente de sus usuarios. El rediseño de Cabify nos sirve de ejemplo.

Por eso, las compañías deben tener carácter innovador, adelantarse, ofrecer mejoras en sus servicios, mostrarse abiertas, transparentes y amables con unos usuarios que, de pleno derecho, son muy exigentes. Quieren mejor servicio, mejores productos y, por encima de todo, quieren –queremos– que las marcas sean responsables con el entorno.

En este escenario se enmarca el rediseño que ha presentado por Cabify, un proyecto realizado in house con el apoyo de BrandFor. Su última reestructuración visual ocurrió en 2018, cuando el equipo de marca liderado por Natalia Ruda, Global Head of Brand, presentó un rediseño tímido en el logotipo y algo más atrevido y flexible en su universo gráfico.

Sin embargo, desde 2018 hasta ahora todo se ha dado la vuelta. Una nueva realidad se ha impuesto. En solo unos meses ha cambiado la forma en la que trabajamos, cómo nos comportamos en sociedad, cómo planteamos el escenario de nuestra vida y cómo, en otro plano, exigimos medidas responsables frente al cambio climático que nos acecha con auténtica ferocidad.

rebranding de Cabify en 2021 nuevo logo Cabify 2021

Sostenibilidad e impulso de una movilidad urbana más humana

Cuando una marca se enfrenta a un gran rediseño, lo hace para mostrar cambios sustanciales en su filosofía. Este es el caso de Cabify que es consciente de que «las ciudades están en constante evolución».

El impacto de la pandemia y «la urgencia por abordar la crisis climática» han influido en la forma de desplazarnos y la multi-movilidad, el paradigma de Cabify, debe ser sostenible.

Como explica Natalia Ruda: «Pasamos de ser una aplicación que conecta pasajeros y conductores a activar una plataforma tecnológica de movilidad urbana única, que ofrece más alternativas, seguras, sostenibles y eficientes. Las ciudades necesitan una movilidad que facilite, simplifique y ayude a que las personas puedan llegar donde quieran y cuando quieran con el menor impacto posible. Nuestra estrategia de negocio evoluciona en esta dirección, y nuestra marca tenía que estar alineada con este objetivo para poder lograrlo”.

Cabify aporta dos datos que justifican aún más el cambio de filosofía de la compañía:

  1. Entre el 70% y el 80% de las calles están ocupadas por vehículos particulares que permanecen aparcados el 95% del tiempo.
  1. La exposición a la polución de las ciudades supone 4,2 millones de muertes cada año según la OMS.

Con esta realidad catastrófica, Cabify quiere «inspirar y ofrecer una cara distinta del ecosistema urbano: que las ciudades estén al servicio de las personas, recuperando el espacio destinado a los coches». Y todo ello se traduce en tres nuevos valores de marca: foco en las personas y la ciudad, compromiso superior de calidad y seguridad y visión sostenible.

Rediseño de Cabify, más limpio y de estilo humanista

El rebranding de Cabify, enfocado por el equipo de diseño interno y liderado por Carlos Tallón –Vicepresidente de Diseño–, busca evolucionar «los principales elementos de la marca» y aportar coherencia del look & feel en todos los puntos de contacto con el usuario de todos los mercados.

Inspirados por una ciudad sana, desde Cabify explican que les ha guiado el espíritu de «ganar claridad, sencillez y cercanía». Así, su nuevo logotipo se desprende del símbolo para evitar ruido y tipográficamente se nutre del estilo humanista, con formas dinámicas redondeadas y sin serifa. Sorprende la unión de los caracteres finales -f e -y, único gesto gráfico tipográfico diferencial.

Del logotipo nace una tipografía única para toda la comunicación de marca que han denominado Cabify Brand y que cuenta con los pesos light, regular y bold. Tal vez lo más arriesgado del proyecto de rediseño de Cabify está en su paleta de color que mantiene el color púrpura matizado que adoptaron en 2017 y que ahora denominan Morabul (Pantone 266), mientras que en paralelo añaden una gama secundaria de colores muy vitalistas.

rebranding Cabify

Recursos visuales poco arriesgados para una apuesta arriesgada

Del nuevo estilo visual de Cabify es importante destacar la mezcla de fotografía e ilustración que usan indistintamente. Estos recursos son tal vez lo menos llamativo de todo el proyecto.

En particular, el uso de ilustración por parte de las marcas es un recurso que está cobrando mucha importancia, pero el estilo que necesita Cabify para expresar lo potente de su apuesta por la sostenibilidad, ¿no necesitaría un estilo más original, más urbano, más espontáneo y, por supuesto, mucho más diferenciador? Un ejemplo de una marca –de otro sector– es el excelente trabajo ilustrativo por el que apostó el servicio de correo MailChimp en su espectacular rediseño de 2018.

Pero, la nueva identidad de Cabify, no solo afecta a lo visual. También lo hace respecto a su identidad verbal, un tema abandonado hace años en los grandes proyectos de branding que, hoy en día, es básico para el crecimiento de las marcas. Porque no solo es importante cómo se ve una marca, también lo es cómo nos habla y qué nos dice.

rebranding Cabify

La ciudad es tuya, el lema

Este proyecto tiene la idea de mostrar la apuesta tecnológica de Cabify y también su compromiso por la sostenibilidad. En este marco, algo no ha cambiado. Es su lema, La ciudad es tuya, que nació del proyecto de rediseño previo de 2018. El motivo por el que no hay un cambio en este aspecto es porque la compañía entiende que su nuevo posicionamiento no traiciona su baseline e, incluso, que lo reafirma y le aporta más sentido.

Los lemas de las grandes compañías son, o deben ser, un verdadero compromiso. Si es falso, si no responde a la esencia de la marca o si es un over promise, los consumidores castigarán a esa marca.

Por tanto, si la apuesta de Cabify es mantenerlo, es porque sienten la seguridad de que, con su servicio y bajo sus nuevos valores de marca, pueden ofrecer a los urbanitas la ciudad y que la sientan, sean de donde sean y vengan de donde venga, suya.

Y así, afirman con claridad desde Cabify que el baseline «motiva a sus usuarios a recuperar el espacio urbano y disfrutar de la ciudad» porque «priorizar el rol de las personas en las ciudades es el reto que mueve los siguientes pasos de Cabify».

rediseño de Cabify

Conclusiones

Es complejo valorar un rediseño de una gran compañía internacional en el mismo momento en que se lanza. En un primer impulso, examinamos lo visual, pero ya sabemos que lo visual no puede estar vacío de contenido. Lo gráfico solo tiene sentido como apoyo de lo estratégico y del posicionamiento de la marca.

Por tanto, si una marca no es otra cosa que su día a día, cómo hace sentir a los usuarios y qué aporta a la sociedad, esperemos para valorar este proyecto. Esperemos para saber si Cabify nos ayuda a recuperar la ciudad, a hacerla nuestra y a romper dinámicas contaminantes. Si es así, todo tendrá sentido, aunque su rediseño, en principio, luzca tímido. Además, la realidad de una identidad gráfica de marca es, en realidad, cómo se ve de forma cotidiana y a lo largo de los meses. Y, con suerte, de los años.

La entrada El rediseño de Cabify: limpieza visual para expresar sostenibilidad se publicó primero en Brandemia.

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